-Señor, ¡no soy nada!
-Pero lo eres todo para Mí.
-Señor, ¡no valgo nada!
-Pero Yo di mi vida por ti.
Señor, ¡oro ante Ti como un autómata!
-Pero Yo estoy dentro de ti, silencioso, atento.
-Señor, ¡cuanto me das lo estropeo!
-Pero recibe sin echar cálculos lo que Yo quiera darte.
-Señor, ¡no puedo más! ¡Me autodesprecio!
-Pero...¿no estás hecho a imagen y semejanza mía?
-Señor, ¡no me siento a gusto con mi forma de ser!
-Déjame introducirme en ella cada día un poco más
-Señor, no soy nada, nada puedo, no valgo nada y para nada.
-Pero ten confianza en Mí. Acéptate y acepta a los demás, ten paciencia de ti como Yo la tengo contigo.
Dios es así: nos ama gratuitamente y no se cansa de esperarnos (¡y mira que a veces nos hacemos de rogar!). Hoy he salido al campo con mi bici y no podía dejar de admirar todas las cosas que ha hecho el Señor para que los hombres le encontremos a través de ellas: todo nos habla de Dios, desde la yerba que se apiña al borde del camino hasta los pájaros que pían alegres. Y nosotros estamos aquí para perpetuar la belleza y cuidar de ella sin desfallecer. La vida es bella y debemos cuidarla, no basta con decirlo: ¡hay que hacerlo! ¡es nuestra responsabilidad!. Dios se nos expresa constantemente y espera que le oigamos en el bullicio de la ciudad y en la tranquilidad de la montaña....
Y tan es así que inspira canciones tan lindas como esta:
Que tengan lindo día...
2 comentarios:
cada frase puede salir cada día de mi boca. Ese amor gratuito es el que me da fuerzas y aliento para confiar cada día en ÉL. Besos
Gracias por tanta hondura. BESITOS.
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