domingo, 30 de mayo de 2010

Día Pro orantibus



No quiero dejar pasar este día tan señalado sin recordar a aquellos que oran por todos nosotros, por el mundo, por los enfermos, por los pecadores, por los amigos y por los enemigos, por la paz, la solidaridad, la conversión sincera de las almas: los hombres y mujeres que han consagrado totalmente (en una llamada dentro de la llamada muchas veces) a Dios por los hombres.

Ellos, que están, podría decirse, en intimidad constante con Dios, viven una vida recogida e invisible a los ojos del mundo. Hay que ser muy valiente para dejarlo todo atrás, pero, sobre todo, hay que tener mucho amor para dedicar todas las horas del día a salvar almas. Pues eso era lo que decía Santa Teresita: dame almas para llevarlas a Tí, Señor.

Aquí, en la red, conocemos a algunas porque escriben al mundo para que comprendamos lo felices que son viviendo esa vida y ya hay varios documentales que nos hablan de ellos.

Recemos nosotros hoy para que se mantengan fieles a la llamada, para que se entreguen cada día más, para que haya muchas más vocaciones y para que sigan siendo el tesoro de la Iglesia.


7 comentarios:

Escalante dijo...

Marisela, gracias por traernos a cuenta esto. He estado durante toda la semana anterior en un retiro y lo hice en un monasterio de benedictinos. La experiencia maravillosa, tanto por el clima de oración cómo de estas personas entregadas con todo el corazón a su vocación particular. Vocación muy de valientes.

Angelo dijo...

Me encanta la vida monacal. Solo ver las fotografias ya respiro paz. ¡Cuanto debe consolar a Dios las oraciones y sacrificios de estos hombres y mujeres! Gracias por recordarlo en tu blog. Un beso fuerte

El lirio del yermo dijo...

Hola Marisela.Tienes mucha razón.La vida contemplativa es muy importante.Juan Pablo ll dijo que son "los pulmones de la Iglesia." También nosotros podemos ser contemplativos aprovechando tiempo libre y cultivando el silencio interior.
Gracias.

Militos dijo...

No sabes, querida, cómo envidio a los contemplativos y no porque piense que llevan una vida tranquila, ya que sé que no es así, sino porque están siempre delante de Dios, adorándole y pidiendo por este mundo ingrato que todos formamos.

Estoy contigo, Marisela, y con tu muchísimo trabajo.
un beso con todo mi cariño

Angelina de Maria dijo...

SI,AMIGA MARISELA RECEMOS PARA QUE NUESTRA IGLESIA SE LLENE DE TESOROS ESPECIALMENTE ,POR NUESTROS JOVENES QUE ESTAN SIENDO RODEADOS Y PERSEGUIDO POR LOS ESPEJISMOS DEL ENEMIGO DEL ALMA.
UN ABRAZOTE SEÑORA Y QUE DIOSITO ME LA PROTEJA.

ANGELINA.

Magicomundodecolores dijo...

Escalante: sana envidia me das al decirme que has estado en un monasterio. Yo estoy buscando tiempo para hacer una tanda de Ejercicios, los de San Ignacio, en un convento, pero necesito acoplar con la superiora, pues tendría que tener ayuda espiritual para hacerlos.
Me paso por tu blog y así te saludo mejor. Gracias.

Magicomundodecolores dijo...

Angelo: es cierto que estas fotos respiran paz interior, de esa que sólo Dios procura. Yo visito a las Oblatas de Cristo Sacerdote de mi ciudad y me encanta estar un rato con ellas, en silencio, solo sintiendo esa presencia que las envuelva y siempre me dan consejos y palabras de aliento. Son sabias porque están cerca de ´´El. Recemos para que haya más vocaciones. Un abrazo.

Hola Lirio del yermo: tienes razón cuando dices que son los pulmones de la Iglesia: ellos le hablan a Dios de nosotros, sin nombres, pero Él nos reconoce a todos. Paso por tu blog a visitarte. Gracias por comentar.

Querida Mili: es cierto que estoy hecha un trapillo por el trabajo, llevo unos meses fatal por la lejanía de Antonio y la responsabilidad de cuidar de mi sobrino y mi madre a veces me roban más tiempo del que quisiera, pero no dejo de asistir a las misas, visito al Sñor mucho y nunca me olvido de nadie, siempre estás en mis oraciones, tenlo por seguro.Un besote.


Angelina de María: gracias por la visita, yo te leo mucho, aunque no siempre comente. Espero que la oración de todos llegue al Señor para que llame a muchos más jóvenes a seguirle en los diversos modos de la vida cristiana. Un abrazo en Cristo Jesús.