lunes, 21 de septiembre de 2009

Jaculatoria diaria





PODEMOS CONVERTIR NUESTRO TRABAJO EN ORACIÓN. NUNCA PODREMOS SUSTITUIR LA ORACIÓN POR EL TRABAJO









8 comentarios:

Angelo dijo...

Me suena mucho a lo de Santa Teresa. También entre los pucheros anda el Señor. Ciertamente una jaculatoria para vivir durante el día. Muchas gracias

ARCENDO dijo...

Claro que sí, querida mia. Claro que podemos convertir TODO lo que hagamos en oración, simplemente hay que tenerle presente SIEMPRE, y que duda cabe que las jaculatorias son un medio fantástico, como también ofrecer nuestras tareas del día por algo o alguien concreto, así la cruz se hace más llevadera y cobra sentido.
BESOS.

Magicomundodecolores dijo...

Querido Ángel : no andas muy errado, pues fue una Teresa la que dijo esa frase, la Madre Teresa de Calcuta, que siempre veló porque no nos diluyéramos en el trabajo y olvidásemos la oración, que es la forma de dialogar con el Señor.

Magicomundodecolores dijo...

Arcendo: yo aprendí a hacer jaculatorias en el día a día cuando estuve con las salesianas, pues es una forma breve y concisa, a la vez que alegre, de recordarle a Dios que tú estás pensando en Él. Por eso he decidido ponerlas, para que ayuden a muchas gentes a aprender o recordar hacerlas. Es una práctica posiblemente algo "pasada de moda", pero que Dios agradece.
Es gracioso, pero tengo un compañero de trabajo, celador para más señas, que siempre que me ve me dice: Ave María purísima. Y siempre que le respondo le comento: ¡No sabes el bien que me haces al recordarme a nuestra Madre!.
Son cosas sencillas, pero eficaces. Espero que mis lectores las aprecien.
Besos y bendiciones.

ARCENDO dijo...

Claro que las apreciamos..., y de pasadas, eso depende de nosotros, si nosotros las hacemos presentes, dejan de ser pasadas.
Gracias y besos.

Natalia Pastor dijo...

Una jaculatoria,querida Marisela, que alivia la pesada carga de cada día, y que nos permite mediante la oración, llegar a Dios.

Un beso.

Salvador Pérez Alayón dijo...

Hace algún tiempo ando dándole vueltas a esta forma de orar. Y es que muchas veces te sobrecoge la pereza, la abstracción y el quedarte en blanco. Te suena como a simple repetición que no llega a llenarte ni a coger tu vida. Te parece algo fuera de tu realidad.
Y he empezado a tomar los momentos que debes hacer algo por oraciones vivenciales y comprometidas. Momentos que, estando en oración, tu presencia es reclamada y paso de la oración a la vida, esforzándome en hacer lo solicitado con la paciencia, el gusto y el servicio más esmerado y lleno de amor.
No son jaculatorias, pero si son actos de oración que interrumpes, y los llenas de amor manifestado en acciones concretas. Y, en mi caso actual, la oración se te vuelve más satisfactoria, llena de contenido y hasta más gozosa.
Un fuerte abrazo.

Magicomundodecolores dijo...

Me alegra que apreciemos el valor real de las jaculatorias, aunque a veces se nos hayan olvidado por pereza o pensar que es simple repetición. Y siempre podemos pensar en una simple oración, corta, sencilla, pero que hable directamente a Dios. El Ofreciemiento de Obras ya es eso por sí mismo.
Gracias a todos por vuestra opiniones: que el Señor nos de sabiduría ne discernimiento y la mejjor forma de llegar a Él.