Era una chica con una vida por delante y se la han robado. En la oscuridad de la noche, con la alevosía cujiendo en sus huesos y la ira temblando en sus manos, le quitó la vida, algo que ya no podrá remediar, aunque le pusieran grilletes y le encerraran toda su vida, no devolverá a sus padres a su hija. Quiero pedir a este o al próximo gobierno que acabe de modificar las leyes para que aquellos que cometan esos crímenes abyectos e injustificables, reciban un castigo adecuado. Como cristianos, no podemos pedir su vida; pero sí podemos exigir una ley que no les permita salir a la calle sin arrepentimiento alguno.
Por Marta hemos rezado desde el primer momento en que desapareció, ahora que sabemos que no volverá, sólo pedimos al Padre que le reciba en su seno. Descansa en paz.
Por Marta hemos rezado desde el primer momento en que desapareció, ahora que sabemos que no volverá, sólo pedimos al Padre que le reciba en su seno. Descansa en paz.
1 comentario:
Hay una absoluta falta de valores morales y éticos, que conducen a esta degeneración en la que está sumida la sociedad española, y por ende,la juventud.
Sin disciplina de profesores y padres,(que es algo carca y retrógrado...),el colegueo,el sexo a edades en las que mi época se jugaba con muñecas, lleva a que estas generaciones no estén imbuidas de la cultura del esfuerzo y el sacrificio,del trabajo y la dedicación,si no de la cultura de la botellona y el desparrame.
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