viernes, 10 de abril de 2009

Viernes Santo:Muerte del Señor.



No abras los ojos cuando yo te beso

en la cruz, oh Señor, do estás clavado

porque llego a besarte avergonzado

de ver que de ofenderte nunca ceso.

No abras los ojos porque siento el peso

de tu blanda mirada en mi pecado,

y temo que tu amor se haya olvidado

y la vergüenza quiera helarme el beso.

No me mires, Señor, que si me miras

cuando para salvarme en cruz expiras,

será la pena y el dolor tan fuerte,

que los ojos te pido que retires.

Pero ¿cómo te digo "no me mires"

si ya, Señor, te los cerró la muerte?.


Bernardo Velado Graña.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso poema nunca lo habia leido.

Saludos.

Gusanita

Salvador Pérez Alayón dijo...

Realmente, si llegaramos a tomar conciencia de nuestra indiferencia, de nuestros rechazos y fracasos, días tras días, nos tendríamos que avergonzar y no atrevernos a mirar al SEÑOR.
Ese es el milagro, que a pesar de todo eso, el SEÑOR nos perdona, nos toma de la mano y nos levanta.
Feliz Pascua de Resurrección.

Magicomundodecolores dijo...

Ambos tenéis razón: por una parte el poema es bello, pero por otra, retrata nuestras faltas de amor (el verdadero pecado) ante el sacrificio de un Dios que se hizo hombre para comprobar nuestras angustias, miedos, decepciones, alegrías,penas, y al final, fue rechazado. Pero su misericordia no tiene fin, así que recemos porque sigan llegando más hombres a la misma conclusión.
Gracias por la visita y abrazos,